Hoy, día 8 de septiembre del 2011 ha sido nuestro primer día en la clase de Dibujo, Análisis e Ideación.
Nosotros, como buenos e inexpertos alumnos que somos, hemos entrado en el aula y al ver unas sillas orientadas hacia la pantalla de un proyector, nos hemos sentado. Al poco tiempo, entraron en el aula los tres profesores encargados de enseñarnos esa asignatura. Lo primero que han hecho ha sido preguntarnos el por qué de nuestro comportamiento, cual era la razón de que nos hubiéramos sentado así; algo que todos creíamos obvio, pero que habíamos realizado sin pensar.
Nos han dicho que pensásemos si había otras formas de sentarse que fueran mejores, y todos nos quedamos callados. Tras esta reacción propusieron que nos sentásemos formando un círculo, ya que es una forma más comunicativa, en la que observamos las caras de nuestros compañeros y no su nuca. Con esto trataron de mostrarnos que las opciones son infinitas, y que no debemos conformarnos con la primera que se nos venga a la cabeza, sin haber considerado las demás.
El paso de la situación inicial a la final puede parecer un proceso inmediato, y cuando nos hicieron pensar llegamos a la conclusión de que se debía a la imaginación, la creación… pero realmente lo que se había hecho había sido un tanteo.
Después de esto nos mostraron unos vídeos donde se mostraban los ritos de iniciación de distintas culturas africanas. En todas ellas era el paso de la niñez a la edad adulta. Dicho rito se hacía a través de danzas, o también, a través del dolor.
Esta fue la parte más “teórica” porque, acto seguido, pasaron a explicarnos los materiales que debíamos llevar y sacaron a tres afortunados para que lo probasen en el acto. Como era de esperar, siendo el primer día en una clase en la que no hay confianza, salieron muy tímidos. Uno de los profesores intentó quitarnos el miedo que teníamos y, lo primero que hizo fue romper el carboncillo para poder pintar con libertad. Dibujó una serie de trazos, unos más anchos que otros, más oscuros o más claros, y demostrándonos que debíamos disfrutar con ello, sin tener miedo.
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Después de cara diario de clase voy a añadir, siempre que sea posible, algo relacionado con el día en sí y el arte o la arquitectura.
El 8 de septiembre de 1856 nació Jacinto Octavio Picón Bouchet en Madrid, el cual se llegó a convertir en pintor, crítico del arte, escritor y periodista español
El 8 de septiembre de 1906 falleció el arquitecto español Joaquín María Arnau Miramón. Se considera el arquitecto más importante dentro del romanticismo ecléctico valenciano y fue uno de los impulsores del diseño y la utilización de nuevos materiales.
Aprendiz de lapicero 